La segunda mayor economía del mundo buscará reformas que van desde las finanzas hasta el medio ambiente, incluso mientras intenta crear empleos y riqueza.
China ofreció su señal más clara hasta el momento de que se desplazará hacia un crecimiento económico más equilibrado y limpio, con la promesa de librar una «guerra contra la contaminación» y reducir el ritmo de la inversión a un mínimo en una década al tiempo que busca una expansión más sostenible.
En un discurso en la reunión anual del Parlamento chino que comenzó el miércoles, el primer ministro Li Keqiang dijo que Pekín pretende que la segunda economía más grande del mundo crezca un 7,5% este año, el nivel más alto entre importantes potencias del mundo, aunque destacó que el crecimiento no entorpecerá las reformas.
Utilizando un lenguaje cuidadosamente elaborado que sugiere que Pekín ha pensado seriamente en dejar sin cambios su pronósticos respecto al año pasado, Li dijo que la segunda mayor economía del mundo buscará reformas que van desde las finanzas hasta el medio ambiente, incluso mientras intenta crear empleos y riqueza.
Luego de 30 años de vertiginoso crecimiento de dos dígitos que ha sacado a millones de personas de la pobreza, pero que también ha contaminado el agua y el aire y ha sumido a la nación en ominosos niveles de deuda, China quiere cambiar el rumbo y reequilibrar su economía.
«La reforma es la máxima prioridad para el Gobierno este año«, dijo Li a unos 3.000 delegados en una sala de reuniones en el centro de Pekín.
«Debemos tener (…) el temple para enfrentar y romper los grilletes mentales con el objetivo de profundizar las reformas en todos los frentes», agregó.
Las fábricas inactivas serán cerradas, y el trabajo sobre un nuevo impuesto a la protección del medio ambiente será acelerado para crear una economía más verde y más equilibrado impulsado por el consumo y no la inversión, dijo.
Para ayudar a la transformación, el planificador económico de China, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, dijo al Parlamento que el Gobierno buscará un crecimiento de un 17,5% de la inversión en activos fijos este año, su nivel más ralentizado en 12 años.
La inversión es el principal motor de la economía china y representó más de la mitad del crecimiento del año pasado de un 7,7% al expandirse un 19,6%, superando el objetivo del 18%.
Fuente: Reuters