La Comisión Europea (CE) aprobó este lunes el plan de reestructuración del Banco Comercial Portugués (BCP) pues garantiza la viabilidad de la institución sin que necesite nuevas ayudas del Estado.

El Ejecutivo europeo señaló que el plan también asegura la contribución suficiente de parte del banco y de sus propietarios a los costos de la reestructuración y minimiza las distorsiones de competición.

«De acuerdo con el plan, el grupo mejorará los beneficios en sus operaciones domésticas, principalmente por reducir el número de empleados y el tamaño de su red de filiales», destacó la CE en un comunicado.

Bruselas confía en que la iniciativa permitirá al BCP «fortalecer su modelo de negocio» y contribuirá a «garantizar la continuidad del crédito a la economía portuguesa.

Fuente: El Financiero