Un crecimiento mayor de lo esperado en Alemania y Francia impulsó la recuperación de la eurozona en el último trimestre de 2013, lo que supone un mayor potencial para un 2014 más robusto, aunque con riesgos.
Datos del viernes mostraron que la zona de 17 países que comparten la moneda única creció en el último trimestre 0.3% con respecto a los tres meses anteriores, tras el alza de 0.1% en el tercer trimestre, y una décima por encima de lo esperado por el mercado.
La economía de 9.5 billones de euros ya salió en el segundo trimestre de la mayor recesión desde la introducción del euro, pero el desempleo en niveles récord, riesgos económicos externos, la austeridad fiscal y la baja inflación han contenido el rebote.
La oficina de estadísticas de la UE publicará un análisis detallado el 5 de marzo, pero analistas dijeron que el crecimiento del cuarto trimestre estuvo impulsado básicamente por las exportaciones y la inversión.
Una señal positiva es que por primera vez en casi tres años, las seis grandes economías de la eurozona registraron datos positivos.
Alemania, la mayor economía europea, creció 0.4% gracias al aumento de las exportaciones y de la inversión en capital, una décima más que en el trimestre anterior.
Francia, por su parte, lo hizo al 0.3%, y la oficina de estadísticas INSEE revisó la cifra del tercer trimestre a una cifra plana frente al -0.1% anterior.
A pesar de ello, los analistas quisieron mostrarse cautos.
«El año 2014 está lejos de ser un camino fácil para la eurozona, ya que sigue habiendo un número significativo de factores que restringen el crecimiento», dijo Howard Archer, economista jefe sobre Europa en IHS.
Italia, que el viernes iba a cambiar de primer ministro, consiguió volver a crecer por primera vez desde mediados de 2011. Su economía se expandió en apenas 0.1%, aunque para todo el año se contrajo un 1.9%, según la oficina de estadísticas ISTAT.
Italia ha sido una de las economías más rezagadas del mundo desde hace más de 10 años. El crecimiento medio de los últimos 12 años ha sido inferior a cero. Para 2014, el Gobierno pronostica un crecimiento del 1.1%.
España ya ha informado de un crecimiento del 0.3% en el último trimestre del año pasado, el segundo seguido en números positivos. El Gobierno espera que este año esté cerca del 1 por ciento, frente al pronóstico oficial del 0,7 por ciento.
En su reunión a principios de mes, el Banco Central Europeo mantuvo la política monetaria estable, y su presidente, Mario Draghi, dijo que hace falta tener más información antes de tomar una decisión. Hizo referencia a nuevos pronósticos que estarán a tiempo para la reunión política de marzo, y a los datos del cuarto trimestre de 2013.
El crecimiento tiene que extenderse ahora a la creación de empleo, un vínculo crucial que de momento le falta a la recuperación, según analistas.
«Tanto el euro relativamente fuerte como la desaceleración en las economías emergentes son riesgos claramente a la baja para el pronóstico de crecimiento», dijo Martin van Vliet, analista de ING.
«Dicho eso, los datos de hoy, mejores de lo esperado, dan al BCE un poco más de confianza sobre la recuperación, y por tanto, reducen las posibilidades de un recorte de las tasas por parte del BCE el 6 de marzo»
Fuente: Reuters