General Electric (GE) está preparando la ruptura de uno de sus activos financieros más importantes (la filial que emite tarjetas de crédito de tiendas para 55 millones de estadounidenses), ya que se está retirando de uno de los negocios de mayor crecimiento que definieron al conglomerado moderno.

La decisión de deshacerse del negocio, ante los temores por la exposición de la compañía al sector bancario, supone un importante momento en la evolución de GE. GE Capital se expandió hasta el punto de que su cartera de créditos y otros activos la convertiría ahora en el quinto mayor banco comercial de Estados Unidos.

Ya se están llevando a cabo los primeros preparativos para separar el negocio con una salida a bolsa, según fuentes conocedoras de la situación.

GE ha señalado que su negocio de financiación del consumo en Estados Unidos registró un beneficio de 2.200 millones de dólares el pasado año. La división supone unos 50.000 millones de dólares de los 274.000 millones de dólares de créditos pendientes que tiene GE Capital.

La salida a bolsa podría realizarse a principios del próximo año, dijeron las fuentes. Banqueros de JP Morgan Chase y Goldman Sachs Group trabajan ya en una posible operación, dijo una fuente. También se barajan escisiones más pequeñas o ventas de activos, agregaron las fuentes.

La venta de la filial sería más rápida y directa, pero es improbable que surja un comprador para el negocio, dado su gran tamaño y el hecho de que los obstáculos regulatorios impiden en gran medida a los grandes bancos hacer grandes operaciones.

Fuente: WSJ