Las empresas en Estados Unidos sumaron 169.000 empleos en agosto, pero solo 104.000 en julio, lo que sugiere que la recuperación del mercado laboral no está ganando fuerza y podría complicar los planes de la Reserva Federal de comenzar a reducir su respaldo a la economía.
En su informe mensual de empleo publicado este viernes, el Departamento de Trabajo rebajó la cifra combinada para los aumentos de empleos en junio y julio en 74.000. La tasa de desempleo del país llegó a 7,3% en agosto, levemente por debajo del nivel de 7,4% de julio.
El aumento en las nóminas de agosto fue levemente menor al alza mensual promedio de 184.000 observado durante los últimos 12 meses y los 175.000 nuevos empleos proyectados por los economistas. La nueva estimación de 104.000 empleos sumados en julio fue el aumento más débil en más de un año, señal de una desaceleración en la recuperación del mercado laboral.
Se trata del último indicador mensual de tendencias de contratación que verán los funcionarios de la Fed antes de reunirse el 17 y 18 de septiembre y decidir si comienzan a reducir su programa de compra de bonos por US$85.000 millones mensuales.
El aumento en los empleos de agosto siguió concentrándose en el sector minorista, que sumó 44.000 puestos de trabajo, y en el sector de tiempo libre y hotelería, que sumó 27.000. Esta composición de bajos salarios y baja productividad ha generado temores de que la recuperación laboral no hará lo suficiente para impulsar la economía general.
Durante el último año, el salario promedio por hora ha aumentado sólo 2,2%.
Sin embargo, algunos economistas señalan que esta composición sigue un patrón normal tras una recesión, dado que los sectores de baja productividad están obligados a contratar nuevos trabajadores primero, dado que no pueden satisfacer la creciente demanda sin ellos. Por otra parte, para los sectores de mayor productividad es más fácil aumentar la productividad sin aumentar los trabajadores, al menos inicialmente.
Fuente: WSJ