Royal Dutch Shell vendería 15.000 millones de dólares en activos en los próximos dos años, incluyendo algunos yacimientos en el Mar del Norte.
Así lo señaló este martes el diario Financial Times, lo que incrementa la percepción de que las desinversiones de la firma se acelerarían este año.
Shell, encabezada desde hace dos semanas por su nuevo presidente ejecutivo Ben van Beurden, venderá algunos de sus campos petroleros en el Mar del Norte además de partes de su portafolio de refinación y algunos proyectos en etapas iniciales, aseguró el Financial Times, citando a una persona cercana a la compañía como fuente.
Shell y rivales en la industria enfrentan cada vez más presiones de los inversores para que reduzcan el gasto ante un incremento en los costos y un panorama más débil para los precios del petróleo.
La compañía angloholandesa dijo en octubre que aceleraría la venta de activos “significativamente” en 2014 y 2015 para mantener el flujo de efectivo, después pronosticar que los gastos de capital del 2013 llegarían a un máximo de alrededor de 45.000 millones de dólares.
Analistas y banqueros consideraron que algunos de los bloques de petróleo de la firma en Nigeria más una participación del 23,1% que tiene Shell en el grupo australiano Woodside Petroleum -valorizada en más 6.000 millones de dólares a precios actuales- podrían ponerse a la venta.
“No me sorprendería si Shell vendiera algunos activos del Mar del Norte”, dijo Jason Kenney, analista de Santander.
“En el Mar del Norte, algo así como el 80% de su producción proviene del 20% de su base de activos entonces hay una larga fila de posiciones más pequeñas”, agregó.
Desde que Van Beurden comenzó a trabajar junto al presidente ejecutivo saliente Peter Voser a comienzos del cuarto trimestre, la compañía ha cancelado planes para construir una planta de gases a líquidos (GTL, por la sigla en inglés) en Estados Unidos, lo que elevó las esperanzas de los inversores por un régimen de gastos más estrecho.
Kenney dijo que preveía que Shell con Van Beurden al frente se enfocaría en una mayor disciplina de capital, mayor rentabilidad y la venta de activos periféricos.
Fuente: Reuters