Los países de la Unión Europea aprobaron la mañana de este lunes las normas que permitirán la creación del mecanismo de resolución bancaria.
Esto tratará de un sistema de gestión de las quiebras de bancos de la eurozona que incluirá una autoridad y un fondo común para hacer frente a estas situaciones.
El Consejo de Ministros de la UE dio su visto bueno como punto sin discusión al reglamento del conocido como mecanismo de resolución único, después de que los Veintiocho cerraran in extremis un acuerdo con el Parlamento Europeo a principios de abril.
El mecanismo estará formado por una autoridad y un fondo de resolución bancaria único, que en un principio estará formado por compartimentos nacionales que se irán uniendo al cabo de ocho años hasta ser al cien por cien común en 2026, cuando contará con 55.000 millones de euros.
El reglamento aprobado hoy establece la creación del fondo y de sus compartimentos nacionales, así como el procedimiento para la toma de decisiones en la autoridad.
En cambio, las transferencias de los recursos nacionales hacia la caja común y la activación de la mutualización serán reguladas mediante un acuerdo intergubernamental, que entrará en vigor una vez que sea ratificado por la mayoría de los países del euro.
El fondo se alimentará con contribuciones del propio sector bancario, con el objetivo de que funcione como un “cortafuego” que evite que los países tengan que recurrir a las arcas públicas para hacer frente a los costes de las quiebras bancarias.
Los países discuten aún los criterios por los que se establecerán las contribuciones que cada banco deberá aportar al fondo.
Por su parte, la autoridad de resolución será la encargada de tomar las decisiones en coordinación con el Banco Central Europeo (BCE), en su rol como futuro supervisor bancario único para la zona del euro, y contará con representación de los países que comparten la moneda única.
Con el objetivo de que las decisiones se tomen lo más rápido posible, la mayoría de los casos se resolverán en el consejo ejecutivo de la autoridad entre los países afectados por la posible quiebra, siempre en colaboración con el BCE.
Las decisiones sobre quiebras que supongan recurrir a más de 5.000 millones de euros del fondo quedarán en manos del consejo plenario, en el que estarán representados todos los países de la eurozona.
El mecanismo único de liquidación bancaria es uno de los pilares de la Unión Bancaria de la eurozona, junto con el sistema único de supervisión encabezado por el BCE, y entrará en vigor el 1 de enero de 2015, mientras que el fondo de resolución estará disponible un año después.
Fuente: EFE