Este martes, Venezuela negocia con el Banco de Desarrollo de China (BDC) un nuevo préstamo por 5.000 millones de dólares, como parte de un fondo formado por los dos países para diferentes proyectos sociales y de infraestructura, informó un funcionario.
La negociación del crédito, sumado a los 36.000 millones de dólares que ya ha prestado China desde 2007, se da en medio de un escándalo de corrupción por el desfalco de 84 millones de dólares por parte de las autoridades del Banco de Desarrollo Social (Bandes) quienes administraban los recursos.
El presidente del Bandes, Temir Porras, declaró que «estamos avanzando en esas negociaciones y en las próximas dos semanas vamos a tener en Caracas otra ronda que, seguramente, llegará más cerca del objetivo que es firmar un nuevo financiamiento».
China había pasado a ser el mayor prestamista de Venezuela durante el mandato del fallecido presidente Hugo Chávez. El dinero prestado era destinado para las misiones sociales del Gobierno, obras de infraestructura, creación de empresas de capital mixto y financiación para importaciones y grandes proyectos petroleros.
Sin embargo, la imagen del actual gobierno se ha visto afectada tras las acusaciones de corrupción con respecto a los recursos chinos recibidos. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció a principios de julio la captura de cinco funcionarios del Bandes por el desfalco, comprometiéndose a llegar al fondo de esta situación.
La vicepresidenta del Bandes, María González, también está siendo investigada luego de que fiscales estadounidenses la involucraran, junto a otras tres personas, en el pago de sobornos por los que había tomado ilegalmente más de 5 millones de dólares.
En su Barómetro Global de Corrupción 2013, la organización Transparencia Internacional coloca a Venezuela en el tercer lugar como la nación sudamericana con mayor aumento de la corrupción, seguido por Argentina y México.
Fuente: www.el-nacional.com